viernes, 29 de marzo de 2013

El beso del ángel


              

    Las  gotitas recorrieron mis mejillas con la suavidad de una caricia infantil.  Pasé del sueño a la vigilia casi sin darme cuenta. Una brisa movió las cortinas de la ventana por donde se filtraba el resplandor adormecido de la ciudad. Entonces lo sentí.
    El beso del ángel.   
   No encuentro otra manera de describir ni explicar ese increíble suceso que por alguna razón no me produjo temor ni sorpresa. Mi mente se elevó, despojándose de sus cadenas, transmitiéndome una sensación de paz que  jamás había experimentado.   
    Era un beso, sí. Se materializó de la nada, trayéndome un mensaje que hablaba de lluvia, de viento, de cielos lejanos, de palabras y paisajes apenas insinuados. Era un mensaje luminoso que se expandía, concentrándose al mismo tiempo  en las oscuridades de mi interior.
    En la infinitud de ese instante fui sabio. La vida explotó en cada una mis células como en un nuevo y verdadero nacimiento. Reconocí cada uno de mis errores, las pisadas vacilantes del camino transitado, las huellas de mis pies y mis rodillas como puntos suspensivos… Comprendí al fin la magnitud y el significado de un sentimiento sublime cuyo nombre no me atrevo a pronunciar.
   Ahora sabía de qué se trataba, aunque apenas me regalaba la fugacidad de un roce.
   Me incorporé con lentitud, midiendo cada movimiento, caminando a tientas. Cuando encendí la luz, el espejo devolvió la expresión relajada de mi rostro. Pensé que había llorado, pero mis ojos decían que las pequeñas gotas transparentes no eran lágrimas; su sabor dulce llegó hasta mis labios como una prolongación del beso. Desde algún lugar indefinido llegaba un delicado perfume de mujer.
    Presiento que hasta mi última noche seguiré aguardando el regreso del ángel. Su beso me ha condenado.

martes, 26 de marzo de 2013

No importa el credo, importa la fe.
Celebres como celebres, celebres lo que celebres,
siempre es más lo que nos une que lo que nos separa.

Este año las fechas de las Pascuas Judías 
y las de las Cristianas 
"caen" muy cerca entre sí
 y muy cerca de otra fecha muy importante para los argentinos como es el dos de abril.
Si yo hubiera sido varón, probablemente hoy sería 
veterano de Malvinas... 
o estaría muerto.
En memoria de todos los que murieron, 
y siempre a favor de la unión y la paz
les dejo este video para recordar
lo importante
¡Felices Pascuas y Jag Sameaj!